Apagón 25F y las oportunidades para el almacenamiento

Viernes 6 de Junio de 2025

Editorial

Directora de Domo Legal en Edición Junio de la revista Electrominería (extracto).

Daniela González, socia directora de Domo Legal, señala que el avance de la Ley 21.118, de 2018, en que se reconoce al almacenamiento y se permite su remuneración por servicios a la red, ha sido realizada «por partes y no de manera integral y a paso lento».

A su juicio, si bien se ha permitido la participación en el mercado de corto plazo y el reconocimiento de potencia de suficiencia para el arbitraje de energía, todavía persisten vacíos cruciales.

«Aún faltan por establecer en forma clara las reglas de programación y operación de estos sistemas que serán materia de la modificación del reglamento de la Coordinación hoy en curso», afirma la especialista.

Además, advierte sobre el rezago en la regulación de otras aplicaciones del almacenamiento, como los servicios complementarios y su rol como infraestructura de transmisión, así como la necesidad de una reforma en la distribución para su integración a nivel distribuido.

Por su lado, Paola Hartung, directora de Asuntos Regulatorios de AES Andes, coincide en que la modificación al Reglamento de Coordinación es una «gran oportunidad» para abordar estos desafíos técnicos y adaptativos.

Subraya la necesidad de que el mercado perciba «señales económicas claras, que permitan incentivar su uso más allá que solo en el arbitraje de energía, sino que también en asegurar la calidad y seguridad del servicio».

A su juicio, el almacenamiento hoy tiene un impacto relevante en la determinación del costo marginal y operación del sistema, y su costo de oportunidad debe ser interiorizado tanto para efectos de programación y remuneración adecuada, aún si esto requiere adaptar las herramientas tecnológicas existentes.

Un Potencial Inexplorado

La pregunta de cómo el almacenamiento surge como una opción frente a apagones encuentra eco en ambas expertas. Daniela González señala que el almacenamiento es “una tecnología clave para garantizar una operación segura y confiable en un sistema 100% renovable al 2030 aportando en la estabilidad y fortaleza que la red necesita”.
”Entonces es claro que los sistemas de almacenamiento debieran contribuir en la prestación de servicios complementarios, específicamente en la regulación de frecuencia, la definición de reservas, el control de tensión y la recuperación del servicio como la partida en negro”, afirma González, destacando su potencial para la gestión de excedentes de energía renovable y de la demanda.

Paola Hartung recuerda que los sistemas de almacenamiento “siempre han sido infraestructuras capaces de dar respuestas rápidas de reservas ante contingencias”. Sin embargo, lamenta que “la regulación actual no ha dado incentivos suficientes para que los sistemas de almacenamiento oferten y presten servicios complementarios – por ejemplo de reservas – de forma permanente”. En su opinión, “incentivar la prestación de todo tipo de servicios, incluyendo reservas rápidas, ayudaría mucho en la contención de la frecuencia ante grandes perturbaciones, mitigando el riesgo de eventuales apagones en el sistema”.

El apagón del 25 de febrero, en este contexto, podría interpretarse como una manifestación de la necesidad de contar con estas respuestas rápidas y eficientes que el almacenamiento puede proveer.